En las últimas horas de la madrugada de ayer, un tremendo incendio destruyó casi en su totalidad el barrio Las Yaguas. Las 1200 casas que constituían este distrito de familias pobres, o fueron víctimas total de las llamas o experimentaron daños de consideración. Unas 4000 personas han quedado sin hogar. La combinación fotográfica recoge una vista panorámica de cómo ha quedado el citado barrio.
Gritos de horror en medio de las llamas y humo se oían en la madrugada entre los vecinos de dicho reparto.
Indescriptibles escenas patéticas. Niños, mujeres, jovenes y ancianos sorprendidos por el fuego mientras dormían.
Esta mañana, el juez de guardia diurno, Dr. Claudio J. Padrón, titular del Juzgado de Instrucción de la Quinta Sección, recibió el informe del capitán Roberto González Arrate, relacionado con el pavoroso incendio ocurrido en el barrio de indigentes Las Yaguas, situado en las laderas de la Loma del Burro, en Luyanó, a consecuencias de cuya conflagración fueron reducidas a cenizas más de 1200 casetas de yagua, maderas viejas, latas, dejando sin hogar a más de 4000 familias, resultando una persona completamente carbonizada –autor del siniestro- y otras siete con quemaduras y lesiones disemindas por el cuerpo.
Las llamas que se iniciaron como a las 2.30 de la madrugada, se propagaron rápidamente por la fácil combustión de las casetas, el viento reinante y la carencia de agua en aquel reparto.
El pánico que se apoderó de los vecinos fue indescriptible, ya que sorprendidos por las llamas cuando dormían, la mayor parte de ellos solo tuvo tiempo de salir de sus míseros hogares con las únicas ropas que vestían para poder salvar la vida.
La candela y los gritos de horror de los residentes, llamando y buscando a sus hijos, madres y familiares cercanos en la oscuridad de la noche, convirtió en pocos momentos aquella zona en un infierno que imposibilitaba la actuación de los bomberos y policías.
Las llamas se iniciaron por la caseta número 5, domicilio del carpintero ebanista Gumersindo Pedroso Landa, de 41 años de edad. Al decir de los vecinos, Landa llegó a su hogar borracho a las 2.00 de la madrugada, como era su costumbre, en cuya ocasión encendió una lamparita de luz brillante, conocida por “chismosa”, y la colocó sobre la mesa de noche. Luego se tiró a la cama y dándole un manotazo a la lámpara, ésta cayó junto a las paredes de yagua, iniciándose de este modo la conflagración.
Como quiera que Pedroso, debido a su estado, no pudo salir a tiempo, quedó aprisionado entre las llamas, muriendo totalmente carbonizado.
El Ministro de Salubridad, Dr. Carlos Ramírez Corría, sostuvo en la mañana de hoy una entrevista con la prensa, a la que informó las distintas medidas dictadas en el barrio Las Yaguas en vista de la grave situación. “Con la experiencia que tenemos en el ensayo que llevamos a cabo en el también barrio de indigentes Cueva del Humo, en donde cooperaron estrechamente los habitantes y la Salubridad, pensamos que esta vez también obtendremos rápidos resultados en la gestión de salud y de atención material a los damnificados.
Toda la población debe cooperar, al plan de hacer barrios rehabilitadores donde se pueda elevar el nivel cultural de los adultos y asegurar la debida protección y futuro de los hijos. El grupo de trabajadores sociales viene haciendo una bella labor y no es utópico pensar, que pronto esos barrios llamados de indigentes dispondrán de instrumentales, dispensarios, escuelas y hasta pequeñas industrias".
Ver vídeo: el-barrio-marginal-de-las-yaguas-es-devastado-por-un-incendio-1950
foto: Walker Evans (1933)
texto: El País, Abril 1950
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