Pedro Deschamps Chapeaux
De las maestras de la época, la más
popular y cuya fama llegó hasta nuestros días, fue Juana Pastor, mestiza libre,
nacida en el barrio de Jesús María, a la que se concedió autorización en 1835
"para establecer y dirigir una
escuela de primeras letras de personas de su clase y sexo en virtud de haber
justificado su completa aptitud con el inspector de la clase de educación de la
Real Sociedad Económica de Amigos del País..."
En
su escuela no estableció diferencias. enseñaba a todo el que a ella acudía y muchas
de las personalidades del barrio de Jesús María cursaron los primeros estudios
en su modesta escuela.
Claro
está, que económicamente nada podía significar Juana Pastor dentro de la clase,
cuando la enseñanza se impartía casi gratis y sobre todo en su barrio, habitado
por las capas más pobres de la población habanera.
No obstante esa innegable realidad, el 11 de
mayo de 1835, Juana Pastor presentaba pública demanda contra el pardo miliciano
Manuel Ibarra, reclamando el pago de $ 204 que le había facilitado el 5 de mayo
de 1823, es decir nada menos que doce años antes, y que éste se había
comprometido a devolver en el término de un año.
En
su escrito exponía la Pastor, que careciendo de bienes de fortuna, hacía la
reclamación
"mi sexo no me permite adquirir con mi personal trabajo lo
necesario"
Además de maestra, Juana Pastor alcanzó fama como poetisa y célebres
fueron algunas de sus improvisaciones, recogidas por la tradición popular.
Pedro Deschamps Chapeaux: El negro en la economía habanera del siglo
XIX, 1971, p. 128-29.
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