Vizconde de Lascano Tegui
Balance
¿Quién
soy? Un franciscano, de esos que andan descalzos.
He
renunciado al mundo y voy oliendo a muerto.
Me
quedan unos dientes, pero los más son falsos,
y
son los más bellos, por cierto...
Como
una solterona, tuve un cofre relleno
de
recuerdos que olían la humedad del pasado,
hasta
el día en que, siendo sensible a su veneno,
del
cofre hice cenizas.
Tan
sólo me han quedado:
unas
canas discretas, un poco de barrica,
una
carta afectuosa de una amiga
con
la fecha atrasada para hacer menos mal,
una
sonrisa aviesa que retiene mi labio
y
una lenta desenvoltura de sabio.
Es,
en saldo de cuentas, todo mi capital.
Soberbia
Caras y Caretas, 1ro de octubre de 1927, núm. 1513, p. 146; 28 de abril de 1928, núm. 1.543, p. 24; y 11 de noviembre de 1928, núm. 1.572, p. 50.
Soberbia
Yo tengo un gran amor por
la pobreza,
y, poniendo mi mano sobre
el pecho,
confieso que me encuentro
satisfecho
de lo poco que tengo en la
cabeza.
Tengo un poco de sueño con
que velo
la desnuda aspereza del
camino;
en las nubes columpia mi
destino,
y he marcado mis tierras
en el cielo.
El oro y su miseria no me
alcanza.
Llevo por contraseña a la
esperanza.
La intemperie me adula y
me hace fuerte.
Ni los perros me ladran:
soy tan pobre...
En mis arcas vacías rueda
un cobre
con que pagar la barca de
la muerte.
Al fin de tantos años...
Al fin de tantos años eres
mi confidente,
corazón que me escuchas
como un profundo amigo.
Te ha cansado la lucha, y
un aire indiferente
te da todos los rasgos banales de un testigo.
Al fin puedo mostrarte el
amor que persigo
sin que bajes los ojos y
llores de repente,
sin que pases las noches,
al aire y sin abrigo,
recorriendo los bosques de
la Bella Durmiente.
El encanto ha concluido.
Ella se ha despertado.
Pero yo, corazón, de
pronto me he encontrado
que me faltan las ansias
que animabas ayer.
Tengo cuarenta años, que
los llevo de prisa,
tengo varias arrugas que
arrugan mi sonrisa
y la Bella Durmiente es
sólo otra mujer...
Caras y Caretas, 1ro de octubre de 1927, núm. 1513, p. 146; 28 de abril de 1928, núm. 1.543, p. 24; y 11 de noviembre de 1928, núm. 1.572, p. 50.
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