Páginas

lunes, 29 de abril de 2013

Campo de Marte





 El Campo Militar, que es la plaza más extensa de la Habana comprende en su recinto enverjado todo el espacio descubierto que aparece entre los extremos orientales de las calles Real de la Salud, Reina, Estrella y calzada del Monte, y termina junto a los terrenos ocupados antes por los fosos y cortinas del recinto, entre los baluartes de San Pedro y Santiago.

 El lado N. de esta plaza lo componen la manzana de casas que forma ángulo con la calle de la Amistad, y la estación principal de los ferro-carriles de la capital, llamada de Villanueva; y su lado meridional, las manzanas con que terminan por el N. las calles de Palomar, Factoría, Someruelos y Cienfuegos.

 La figura de su recinto es un trapecio de 250 varas en el lado mayor y 150 en el menor. Está cercado en sus cuatro frentes por un enverjado de lanzas de hierro con moharras doradas, cuyas varas se apoyan sobre un muro de mampostería de un solo metro de elevación, para no privar a los transeúntes del espectáculo de los ejercicios militares, a que está principalmente destinada esta localidad, e interrumpido por pilares equidistantes de tres varas de altura, coronado cada uno por una bomba. Junto al vértice de cada ángulo del recinto aparece una garita octógona y almenada, de más de cinco varas de elevación, con tres cañones de hierro que se apoyan verticalmente sobre su base.

 En el centro de cada uno de sus cuatro frentes hay una gran puerta de hierro enverjada y adornada en su parte superior con trofeos militares, y una inscripción que recuerda los nombres históricos del gran Colón, Cortés y Pizarro, y el del general Tacón, bajo cuyo mando se emprendieron y terminaron todas las obras de esta plaza en 1835. El paralelogramo que ciñen las verjas está enteramente descubierto, y los costados de la plaza no tienen otro adorno que la fuente de la India y los árboles del paseo de Isabel II, que se extiende por la paralela de todo el lado oriental del Campo Militar, que también se designa con el nombre de Campo de Marte.


 Pezuela, Crónica...



No hay comentarios:

Publicar un comentario