El celebrado jóven artista
cubano D. Fernando Herrera ha sacado últimamente una copia del famoso cuadro de
Van Dick, la Magdalena, el cual ha merecido la aprobación de todos los
inteligentes que han pasado a verle a la casa de su autor, calle de Villegas número
52.
El cuadro, colocado en un hermoso marco
dorado, representa a aquella mujer memorable de la Escritura
llorando sus pecados a los piés de un crucifijo en el retiro de una cueva,
herida por los últimos rayos del sol poniente que dan al conjunto una
solemnidad que lo realza.
En el rostro de la Magdalena ha sabido pintar
hábilmente el artista la expresión del dolor y la esperanza; sus ojos llenos de
lágrimas y elevados al cielo, su cabellera cayendo en ondas hasta la cintura y
sus manos en actitud humilde dan al cuadro una viveza poética que demuestra la
maestría del artista y la inspiración que dirigía su pincel.
Recomendamos a los amantes de lo bueno y de lo
bello que pasen a ver este cuadro de verdadero gusto, el cual no dudamos se
aprestarán a adquirir protegiendo así los desvelos del artista y la inspiración
del arte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario